Como quitar el agua condensada en los faros
El agua al interior de los faros o calaveras de tu auto es un problema más común de lo que te imaginas. Sin embargo, debes tener cuidado, pues no extraerla podría generar daños en el sistema que proporciona la luz de estas piezas
Probablemente alguna vez has volteado a ver los faros o las calaveras de tu automóvil después de un día lluvioso o de llevarlo al auto lavado y notaste una acumulación de condensación de agua en su interior que no sabes cómo eliminar. Pues bien, a continuación, te compartimos algunos consejos que te podrían ser útiles sobre cómo deshacerse de la condensación en los faros o luces traseras de tu automóvil.
¿Cómo puede afectar el agua condensada al interior de los faros o luces traseras?
Si bien puedes pensar que los faros y las luces traseras de tu automóvil son completamente herméticas, no lo son. Y aunque normalmente estas piezas están selladas de fábrica con un adhesivo fuerte y juntas, es posible que el agua se acumule en ellas con el tiempo. De hecho, también es posible en automóviles nuevos.
La acumulación de condensación puede eventualmente desgastar la luz, quemar la bombilla y hacer que la luz sea inútil, por lo que es importante sacar el agua y solucionar el problema.
Recuerda también que si vas a cambiar las luces de tu auto, debes saber que tipo de faros elegir para ayudarte a tener una mejor visibilidad en el camino que circules, sobre todo cuando es de noche.
. Retira el agua de la luz trasera con un secador de pelo
Si simplemente deseas secar el interior, puedes usar un secador de pelo o una pistola de calor para hacerlo. Haz funcionar con cuidado la secadora o la pistola de calor y pasa de un lado a otro en el exterior de la carcasa para secar el agua restante en el interior; ten cuidado de no quemar la carcasa.
Si hay una cantidad excesiva de acumulación de agua, es posible que desees quitar el faro o la calavera por completo. A continuación, se muestran algunos pasos que puede seguir para eliminar el agua.
El procedimiento para quitar estas piezas de tu automóvil será diferente al de otros automóviles, así que asegúrate de consultar el manual del propietario o encontrar un tutorial en línea para su aplicación específica. De lo contrario, el procedimiento de un automóvil a otro es prácticamente el mismo.
Paso 1: Desconecta la batería del automóvil
Asegúrate de desconectar la batería para evitar que una descarga eléctrica te sacuda cuando estés manipulando las piezas de tu auto. Una vez desconectada la batería podrás manipular con seguridad los componentes eléctricos como las bombillas y cables.
Paso 2: Retira la carcasa
Sigue el manual de servicio de tu vehículo para quitar la carcasa. El procedimiento básico es quitar las cubiertas y luego el conector del arnés eléctrico de la luz. Luego, retira los clips o pernos que sujetan la luz a la carrocería del automóvil. Puedes utilizar un par de alicates de punta fina y un conjunto básico de herramientas.
Paso 3: Separa el arnés de la carcasa
Después de haber quitado todos los pernos y clips, levanta la luz o el arnés para quitarla por completo de la carcasa y que te sea más fácil manipular las piezas internas.
Paso 4: Retira la bombilla de la luz
Ten cuidado a la hora de retirar la bombilla del arnes que la sujeta, pues una vez expuesta podría romperse fácilmente y eventualmente quedarte sin luz hasta que consigas una bombilla nueva.
Paso 5: Ubica la fuente de la fuga
Ahora que se quitaron los componentes, puedes averiguar dónde está goteando. Una forma de hacerlo es llenar la carcasa parcialmente con agua y luego moverla para ver por dónde sale el agua. O simplemente puedes hacer una inspección visual. La mayoría de las veces, las fugas de agua se deben a un mal sellado en la carcasa.
Paso 6: Sella la carcasa
Cuando descubras dónde está la fuga, puedes volver a sellar la luz con un adhesivo para burletes. Si la carcasa requiere más secado, puedes dejar que se seque al aire o acelerar el proceso con el secador de pelo o la pistola de calor.
Paso 7: Vuelve a colocar las piezas
Una vez que hayas secado y vuelto a sellar la carcasa, vuelve a colocar la bombilla al arnes, y el arnés a la carcasa, asegúrate de que todo encaje perfectamente para evitar una nueva fuga.